Entre el 5 de junio de 1948 y el 31 de julio de 1954 de 13 municipios que multiplicaron por 10 el término municipal de Madrid y añadieron 300.000 habitantes al censo, justo antes de que se produjeran las grandes oleadas migratorias desde el sur hacia ambas capitales. Como anécdota valga explicar que el estadio Santiago Bernabéu, inaugurado en 1947 como Nuevo Chamartín, no se hallaba en Madrid. Y no lo estaría hasta 1949.
13 PUEBLOS / Los 13 pueblos anexionados –Aravaca, Barajas, Canillas, Canillejas, Chamartín de la Rosa, Fuencarral, Hortaleza, El Pardo, Vallecas, Vicálvaro, Villaverde, Carabanchel Alto y Carabanchel Bajo– dieron a la ciudad un aspecto desgajado, con grandes espacios vacíos entre núcleos. De hecho, Madrid ha tardado otros 50 años en llenar esos vacíos urbanos con nuevos barrios. Y aún hoy, algunos de esos núcleos siguen separados del resto de la mancha urbana, es el caso de Aravaca y Vicálvaro.
Cabe decir que la anexión de los años 50 tampoco ha acabado con la personalidad de los distritos madrileños.